En el Real Decreto 736/2020, de 4 de agosto, se completa la trasposición de la Directiva 2021/27/UE de Eficiencia Energética y ha entrado en vigor desde el día 7 de agosto de 2020.

Su finalidad es la de establecer las normas para la realización de la contabilización del consumo individual en calefacción o refrigeración de cada vecino y el reparto de los gastos en función del consumo que se realice de los mismos.

Al titular de la instalación (comunidad de propietarios) le establece la obligación de colocar los medios necesarios para facilitar esta contabilización y reparto. Afectan tanto a las instalaciones comunes existentes como a las nuevas.

Para las instalaciones con redes de distribución en anillo, estipula la colocación contadores de energía. Para las redes con distribución en columnas establece el empleo de repartidores de costes de calefacción.

Existen una serie de exclusiones por razones técnicas para las cuales no es necesaria la instalación y que son:

  • En las zonas climáticas α, A y B.
  • Colocación de contadores de energía en anillos con radiadores en serie (con válvulas monotubo) siempre que el anillo suministre a varios usuarios
  • Instalación de repartidores de costes sobre:
    • Radiadores con válvulas monotubo.
    • Ventiloconvectores (fancoils).
    • Aerotermos.

También existe exclusión por razones económicas cuando el coste de la instalación y lectura a realizar no se compense con el ahorro generado en 4 años.

Cuando exista una exclusión, ya sea por razones técnicas o económicas, la empresa mantenedora de la instalación emitirá gratuitamente un Certificado de Exclusión de Instalar que, junto a una Declaración Responsable, será entregado por los titulares de la instalación al órgano competente de la comunidad autónoma donde esté ubicada la instalación centralizada.

En caso de no existir exclusiones, el titular de la instalación ha de solicitar al menos un presupuesto a una empresa instaladora regulada por el RITE para la realización de la adecuación de la instalación al Real Decreto. Los plazos fijados son:

Marca el reparto de los costes en dos partes:

  • Costes fijos: por el mantenimiento de las instalaciones, calentamiento de las zonas comunes y las pérdidas de calor en las tuberías de la red de distribución.
  • Costes variables: por el consumo en las viviendas. Este porcentaje estará en torno al 60 o el 75% del coste total y será una recomendación de la empresa mantenedora.

Los equipos nuevos para la realización de la medición del consumo transmitirán los datos vía radio y tendrán una periodicidad de liquidación al menos cada dos meses durante la campaña correspondiente de invierno o verano.

Los equipos existentes con lectura convencional han de ser sustituidos antes del 2027 y tendrán una periodicidad de liquidación al menos cada dos meses durante la campaña.

Las liquidaciones estarán disponibles para su consulta vía internet.

En caso de que algún radiador no pudiese instalar su correspondiente repartidor de costes, su consumo será estimado como mínimo, con el mayor consumo por metro cuadrado realizado en la comunidad en el periodo de liquidación.

Existe un régimen sancionador que sería aplicable al titular de la instalación, es decir, a la comunidad de propietarios.

El decreto no indica nada respecto a la obligación de cada vecino de instalar válvulas termostáticas. Cada vecino ha de disponer de un sistema que le permita la regulación de sus consumos, por lo que es optativo la instalación de sus propias válvulas termostáticas.

 

Beneficios de reparto de consumos de calefacción

Los beneficios que presenta el reparto de los consumos de calefacción son múltiples, tanto para los vecinos como para la sociedad en su conjunto.

Económicos

Se produce un importante ahorro de combustible sin reducir el confort. No se derrocha energía, no es necesario el abrir ventanas en los pisos con exceso de calor y se pueden apagar los radiadores de las habitaciones que no se utilicen o en los pisos vacíos.

El reparto de los costes originados por el consumo de la calefacción es más justo, pues se paga en función de lo que consume cada vecino.

Según diversas fuentes, como por ejemplo el IDAE, el ahorro puede llegar hasta el 30% del combustible empleado por la comunidad de propietarios. Aunque siempre será función de la regulación final que se realice de las válvulas de los radiadores.

La información mensual individualizada y el detalle del consumo facilita que cada vecino planifique y ajuste su consumo según sus necesidades personales y no de las necesidades del resto de los vecinos.

Medioambientales

La reducción del consumo conlleva un menor empleo de combustibles fósiles no renovables (gas o gasoil) así como de las emisiones de CO2. Por ejemplo, por cada tonelada de gasoil no quemado se reducen en casi 3 las toneladas no emitidas de CO2.

En la instalación

Al no emplearse el calor en radiadores que no lo necesitan, se produce un mejor reparto térmico de la instalación, por lo que el calor que no se usa, está a disposición de los demás vecinos a los que antes apenas llegaba la calefacción. Es el momento de realizar un equilibrado de la instalación.
Además, el desgaste de las calderas es menor al reducirse su consumo y se facilita una mejor regulación de la misma.

 

Ventajas de Ullastres

Como el propio decreto menciona, toda la instalación debe de ser realizada y gestionada por empresas con la suficiente solvencia.
En esto Ullastres es puntera, con más de 100 años a nuestras espaldas, somos una empresa especialista y con acreditada experiencia precisamente en la Gestión Integral de estas instalaciones y sus consumos.

Les ofrecemos la posibilidad de centralizar en una sola empresa todos los servicios correspondientes a sus instalaciones y sus consumos, permitiendo obtener entre otros beneficios:

  • Instalación unificada de todos los elementos necesarios para el cumplimiento del real decreto. Evite problemas de coordinación o garantías.
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Y todo ello orientado a maximizar la eficiencia, el ahorro y el confort.